Manzanares: seguridad y confianza renacen con el respaldo de la Gobernación de Risaralda

Rodeada por los imponentes paisajes del cañón del Cauca, la vereda Manzanares, en el municipio de Quinchía, vivió un día histórico gracias a la presencia integral del Estado, liderada por la Gobernación de Risaralda.




En una jornada organizada por la Secretaría de Gobierno en articulación con la fuerza pública, la comunidad recibió el respaldo necesario para fortalecer la seguridad y la confianza en esta zona rural.

Compromiso gubernamental con las comunidades rurales


Israel Londoño, secretario de Gobierno de Risaralda, agradeció a la Policía, al Gaula, a los carabineros y al Ejército por su presencia en Manzanares, destacando la importancia de estos acercamientos con comunidades apartadas.

“Este tipo de intervenciones son esenciales para construir confianza y atender las necesidades de las veredas que, aunque distantes, son parte vital de nuestro departamento,” afirmó Londoño. Además, anunció compromisos concretos como la gestión para construir placa huellas y la ampliación de la oferta de la Secretaría de Salud.

El Coronel Héctor García Acevedo, comandante de la Policía de Risaralda, reforzó el mensaje de seguridad y respaldo para los habitantes y visitantes de Quinchía. “Queremos que sepan que estamos aquí para protegerlos y ser un motor de esperanza para la región,” afirmó.

Un municipio libre de rumores de inseguridad


El alcalde de Quinchía, Jáder Clavijo, aprovechó la ocasión para desmentir rumores sobre la presencia de grupos armados en la zona.

“Quiero ser claro: estas afirmaciones son falsas. Hoy, Quinchía es un ejemplo de paz y progreso. Es fundamental que los medios actúen con responsabilidad y eviten dañar la reputación de nuestro municipio,” señaló Clavijo, agradeciendo el respaldo del gobernador Juan Diego Patiño.

La voz de la comunidad


Yoanier Guapacha, presidente de la Junta de Acción Comunal de Manzanares, expresó el sentir de los habitantes tras la jornada.

“Estas visitas nos devuelven la confianza, no solo en las instituciones, sino en nosotros mismos. Gracias por escuchar nuestras necesidades y ser parte de este cambio,” destacó Guapacha.

Manzanares pasó de ser un punto aislado en el mapa a convertirse en un modelo de cómo la articulación entre instituciones y comunidad puede transformar la seguridad y la calidad de vida en las zonas rurales.

Publicar un comentario

0 Comentarios